Ramiro Matamoros mantuvo siempre muy buena relación con corredores famosos de su época
A pesar de ser solo un corredor popular, acabó haciéndose un hueco entre todos ellos
Algunos de los atletas famosos y corredores populares citados en esta novela (que no solo narra la historia de Ramiro Matamoros, también refleja el ambiente que se vivía en España cuando empezó el fenómeno del atletismo popular), son Abel Antón, Fernando Mamede, Fabián Roncero, Chema Martínez, Martín Fiz, José Luis González y un largo etcétera.
Algunos, como Fabián Roncero, han querido plasmar lo que significó Ramiro Matamoros para ellos, tanto personal como deportivamente. Por eso, el libro Con los pies sobre el asfalto incluye el apartado: «Lo que dijeron de él», que recoge testimonios sobre el «rey de las populares» de personas de diferentes etapas de su vida.
Fabián Roncero, récordman europeo
«Cuando yo era joven, todo el mundo conocía a Ramiro Matamoros. Entonces yo no tendría más que 14 años, pero recuerdo verlo a menudo en la portada de las revistas de Iberia, Canillejas… Para mí se convirtió en un referente. Pero además tuve la suerte de poder conocerlo también como persona. Nos hicimos amigos, me llevó a
visitar su pueblo, luego estuve un tiempo formando parte de su club.
He sido uno de los que ha podido ver su evolución: cómo pasó de ser atleta a convertirse en entrenador y responsable del club. Lo he visto a lo largo de todas sus facetas y puedo decir que todas ellas las desempeñaba con todo el cariño y ganas del mundo. Ramiro es una persona que lo ha dado todo por el atletismo y que ha beneficiado a mucha gente: uno de los que han puesto su granito de arena para hacer tan grande este deporte.»
Ignacio Barón y Martha Pulido, de Corre en Rosa
Corre en rosa es un proyecto de la doctora Lucía González-Cortijo que ayuda, a través del deporte, a corredoras con cáncer de mama y ovario. Ramiro Matamoros entrena a este grupo de valientes, que tienen dedicados varios capítulos en esta novela, además de este testimonio.
«Siempre quedará la duda de qué hubiera sido de Ramiro Matamoros de haber nacido unos años más tarde y haber podido acceder a las instalaciones, medios técnicos y ayudas económicas con los que cuenta el deporte de nuestro país hoy en día. En nuestro fuero interno todos pensamos que estaríamos ante uno de los más grandes atletas españoles de todos los tiempos, al nivel de las leyendas que alcanzaron la gloria olímpica, mundial o europea. Prueba de ello es el respeto con el que muchos corredores de élite coetáneos suyos hablan de él, considerándolo uno más entre ellos (…).
El destino bien sabía lo que hacía aquella mañana que le situó en el camino de la doctora Lucía González Cortijo y le impulsó a entablar conversación. Una casualidad de la que nació una nueva criatura de la que presumir. Corre en Rosa, ahora ya en su adolescencia como Fundación La Vida en Rosa, es el último de los regalos que nos ha dejado Ramiro. Si Lucía es el alma de este proyecto, Ramiro es el corazón, el callado líder que ha sabido convencer a docenas de mujeres para dar un cambio tras pasar por un cáncer; a ponerse unas zapatillas e iniciar de nuevo la carrera de la vida. En su humildad, Ramiro siempre dice que es a él a quien las chicas de Corre en Rosa han cambiado la vida, llenándole sus días de felicidad. En el fondo lo único que hacen es justicia, devolviéndole el entusiasmo y la alegría de vivir que él mismo transmite cada martes y jueves».